Comer, mantenerse y belleza. Escaparate internacional de ventas. Nadie puede darnos felicidad, porque la felicidad está en nuestro interior. El deseo es considerado la causa de todo sufrimiento. Actívate. Hace unos años decidí perder peso, pero sin éxito, volvía a recuperar los kilos perdidos. Hasta que decidí aprender nutrición y encontré, por fin, mi piedra filosofal alimenticia: adelgazar comiendo. NADIE DEBE AUTOMEDICARME. Lo que dice este blog es solo orientativo.
¿Dónde comprarlo?: Mercadona Marca: Hacendado Presentación: 500 grs Fabricante: Senoble Web del fabricante: www.senoble.fr Precio: 1,40 € Nuestra nota: sobresaliente
Queso fresco a base de leche de vaca 0% M.G.
Buscando sustitutos no grasos de la nata para comer con fresas o para
cocinar y tras la recomendación de unos amigos, me decidí a probar el
queso fresco batido desnatato Hacendado, disponible en los supermercados
Mercadona.
El producto tiene un lado malo y muchos buenos. El malo es para los
amantes del queso: no sabe a queso, tan sólo recuerda un poco al queso
fresco mezclado con yogur cremoso. Un lado positivo es para los que no
soportan el queso: no sabe a queso.
Como se indica en su envase, tiene un alto contenido proteico, lo que lo
hace ideal en la dieta de los deportistas, de hecho, hay muchos
mensajes en foros deportivos recomendándolo, ya que las proteínas que contiene son caseína en su mayor parte, que es una proteína de lenta absorción.
Como cualquier producto de Mercadona, tiene una legión de fans detrás, tal como se muestra en su página de Facebook (¡sí, este queso tiene una página de fans!) y en un amplio recetario en el que lo utilizan.
Los ingredientes del queso desnatado batido Hacendado son los siguientes: leche de vaca desnatada pasterizada y fermentos lácticos.Los valores nutricionales medios por 100 gramos son los siguientes: Valor energético: 46 kcal Proteínas: 8 g Hidratos de carbono: 3,5 g (de los cuales, azúcares: 3,5 g) Grasas: 0,1 g (de las cuales, saturadas: inferior a 0,1 g)
No contiene gluten por lo que es adecuado para celiacos. Aunque
la mayoría de los productos lacteos de Mercadona se fabrican en España
por la compañía francesa Senoble, este queso fresco batido desnatado se
fabrica en la localidad de Jouy, donde, en diciembre de 2010 se abrió un
gran centro de innovación. Senoble es la tercera mayor compañía lactea
francesa (tras Danone y Yoplait) y en nuestro país se centra en la
fabricación de la marca blanca Hacendado para Mercadona. Cuentan con una
planta en la localidad toledana de Noblejas. La fábrica de Noblejas se
surte de las cooperativas de recogida de la Mancha, Extremadura y
Andalucía. Una parte de los aprovisionamientos procede de Asturias y
Galicia.
Además
de su presentación tradicional en una tarrina de 500 gramos, también
está disponible en cuatro cómodos vasitos de 120 gramos cada uno por
unos pocos céntimos más.
De la familia de los moluscos, los mejillones al igual que los
berberechos o las almejas encierran un montón de propiedades nutritivas.
Los mejillones en concreto tienen un elevado contenido en vitaminas, aminoácidos y minerales y son muy beneficiosos para la salud.
Los mejillones son considerados por muchos como auténticas joyas
gastronómicas porque mejoran el estado y calidad de la piel y los
huesos, fortalecen el sistema inmune, ayudan a reparar tejidos e incluso
pueden ser útiles para combatir trastornos mentales como la depresión.
Son un alimento hipocalórico y nutritivo a la vez con un montón de
propiedades. Se trata de un alimento rico en proteínas, y que contiene
un bajo índice de grasas malas, pero un elevado nivel de grasas buenas,
como el omega 3, por lo que resulta favorable para prevenir enfermedades cardiovasculares y reducir el colesterol.
Además se compone de diversas vitaminas y de una buena gama de
minerales (como calcio, yodo, hierro, potasio y magnesio). Por todo
ello, la OMS y el Consejo Regulador Mexillon de Galicia recomiendan su consumo.
Mejillones
Valor nutricional y variedades
Un mejillón
(Luis Diaz Devesa / Getty)
Las proporciones de los nutrientes de los mejillones
varían de acuerdo al tipo y a la cantidad del alimento, pero en líneas
generales, cada 100 gramos de mejillón aportan 86 calorías, 10 gramos de
proteínas, 2 gramos de grasas, 2.3 gramos de hidratos de carbono, 0 de
índice glucémico.
Hay varias especies de mejillones (rubio, mediterráneo,
californiano, barbudo…), y pueden vivir en agua dulce o salada. En el
mercado podemos encontrar mejillones frescos (se pueden comer cocidos,
ahumados, fritos, a la parrilla, al vapor…), pero también se
comercializan en conserva o incluso congelados. Eso sí, si los compramos
frescos tenemos que elegir los que no estén astillados y estén bien
cerrados.
Mejillón
Propiedades y beneficios
Fortalecen el sistema inmunológico
Ricos en vitamina A, una taza de mejillones contiene
proporciona el 10% de la ingesta diaria recomendada para las mujeres y
el 8% para los hombres. Según la Escuela de Salud Pública de Harvard, la
vitamina A hace mucho más que ayudarnos a ver en la oscuridad, estimula
la producción de glóbulos blancos. Estimula la producción y la
actividad de glóbulos blancos, participa en la restauración de los
huesos y regula el crecimiento y la división celular, entre otras muchas
funciones.
Buenos para la musculatura
Quince mejillones proporcionan la proteína equivalente de un filete de 170 gramos de carne magra. Por
lo que los mejillones son una excelente fuente proteica. Necesitamos
consumir proteínas a diario por muchas razones, son fundamentales para
el crecimiento, nos ayudan a preservar la masa muscular, a reparar la
reparación de los tejidos, a producir hormonas y enzimas.
Buenos para los huesos y los dientes
Los mejillones son un tesoro nutritivo rico en vitamina C y fósforo,
lo que los convierte en unos aliados perfectos para fortalecer nuestros
huesos y dientes. Una taza de mejillones aporta casi el 20% de la
ingesta diaria requerida de vitamina C. Además, la vitamina C sirve para
la reparación y mantenimiento del cartílago, los huesos y los dientes,
así como para curar heridas y cicatrizar. Esta vitamina juega un papel
bastante importante en el control de infecciones y es también un
poderoso antioxidante que puede neutralizar los radicales libres
dañinos.
Una taza de mejillones contiene casi el 30% de la ingesta diaria requerida de fósforo.
La función principal del fósforo es la formación de los huesos y los
dientes. Además, desempeña un papel importante en la forma en que el
cuerpo utiliza los carbohidratos y las grasas, y es necesario para que
el cuerpo produzca proteínas que ayudan en el crecimiento, mantenimiento
y reparación de células y tejidos.
Antiinflamatorios
Los mejillones tienen más ácidos grasos omega-3 que cualquier otro
marisco y mucho más que la carne. Un estudio de la Facultad de Ciencias
Médicas de la Universidad RMIT en Australia, identificó que los
mejillones tienen propiedades antiinflamatorias debido a la gran
cantidad de omega-3 que éstos poseen.
Ayudan a tratar la depresión
La vitamina B12 interviene en muchas funciones corporales y ofrece muchos beneficios
para la salud. Algunos índices psicológicos o de comportamiento
relacionados con la depresión pueden mejorar con la administración de
suplementos de esta vitamina según estudios publicados en The American Journal Psychiatry. Se ha investigado que si se tienen niveles altos de vitamina B12 el tratamiento de la depresión consigue mejores resultados.
La arteriosclerosis sucede
cuando los vasos sanguíneos que llevan oxígeno y nutrientes del corazón
al resto del cuerpo (arterias) se vuelven gruesos y rígidos, en
ocasiones restringen el flujo de sangre hacia los órganos y los tejidos.
Las arterias sanas son flexibles y elásticas, pero con el tiempo, las
paredes de las arterias se pueden endurecer, una enfermedad que
comúnmente se denomina endurecimiento arterial.
La aterosclerosis es un tipo específico de arteriosclerosis, pero a
veces los términos se utilizan indistintamente. Aterosclerosis se
refiere a la acumulación de grasas, colesterol y otras sustancias dentro
y sobre las paredes de las arterias (placa), lo cual puede restringir
el flujo sanguíneo.
La placa se puede romper, lo que desencadena un coágulo de sangre.
Aunque la aterosclerosis a menudo se considera un problema cardíaco,
puede afectar a cualquier arteria del cuerpo. La aterosclerosis puede
prevenirse y es tratable.
Síntomas
La ateroesclerosis se desarrolla de forma gradual. Por lo general, la ateroesclerosis leve no tiene ningún síntoma.
Es
posible que no tengas síntomas de ateroesclerosis hasta que una arteria
se estreche u obstruya tanto que no pueda suministrar suficiente sangre
a los órganos y a los tejidos. A veces, un coágulo sanguíneo bloquea
por completo el flujo sanguíneo o incluso se separa y puede desencadenar
un ataque cardíaco o un accidente cerebrovascular.
Los síntomas de la ateroesclerosis moderada a grave dependen de qué arterias están afectadas. Por ejemplo:
Si tienes ateroesclerosis en las arterias del corazón, puedes tener síntomas como dolor en el pecho o presión (angina de pecho).
Si tienes ateroesclerosis en las arterias que conducen al cerebro,
puedes tener signos y síntomas como entumecimiento o debilidad
repentinos en los brazos o las piernas, dificultad para hablar o
balbuceo, pérdida temporal de la visión en un ojo o caída de los
músculos de la cara. Estos indican un accidente isquémico transitorio
que, si no se trata, puede evolucionar a un accidente cerebrovascular.
Si tienes ateroesclerosis en las arterias de los brazos y las piernas, puedes tener síntomas de enfermedad arterial periférica, como dolor en las piernas cuando caminas (claudicación).
Si tienes ateroesclerosis en las arterias que conducen a los riñones, desarrollas presión arterial alta o insuficiencia renal.
Cuándo consultar al médico
Si crees que tienes
ateroesclerosis, habla con tu médico. Presta también atención a los
síntomas iniciales del flujo sanguíneo inadecuado, como dolor en el
pecho (angina de pecho), dolor o entumecimiento en las piernas.
El
diagnóstico y tratamiento iniciales pueden impedir que la
ateroesclerosis empeore y prevenir un ataque cardíaco, accidente
cerebrovascular u otra emergencia médica.
La aterosclerosis es una enfermedad lenta y progresiva que puede
comenzar a manifestarse en la niñez. Aunque se desconozca la causa
exacta, la aterosclerosis puede comenzar con daños o lesiones en la capa
interna de una arteria. Los daños pueden tener las siguientes causas:
Presión arterial alta
colesterol alto;
Triglicéridos altos, un tipo de grasa (lípido) en la sangre
Tabaquismo y otras fuentes de tabaco
Resistencia a la insulina, obesidad o diabetes
Inflamación producida por enfermedades como la artritis, el
lupus u otras infecciones, o bien una inflamación por causas
desconocidas
Una vez que se daña la pared interna de una arteria, los glóbulos y
otras sustancias, generalmente, se aglomeran en el lugar de la lesión y
se acumulan en el recubrimiento interno de la arteria.
Con el tiempo, los depósitos de grasa (placas) hechos de colesterol y
otros productos celulares también se acumulan en el lugar de la lesión y
se endurecen, lo que hace que se estrechen las arterias. Por esto, los
órganos y tejidos conectados a las arterias bloqueadas no reciben
suficiente sangre para funcionar correctamente.
Con el tiempo, es posible que partes de los depósitos de grasa se desprendan e ingresen al torrente sanguíneo.
Asimismo, el recubrimiento suave de una placa puede romperse, lo cual
derrama colesterol y otras sustancias en el torrente sanguíneo. Esto
puede causar un coágulo de sangre, que puede bloquear el flujo de sangre
a una parte específica del cuerpo, como ocurre cuando se bloquea la
sangre que fluye al corazón y se produce un ataque cardíaco. Un coágulo
de sangre también puede dirigirse a otras partes del cuerpo y bloquear
el flujo a otros órganos.
Factores de riesgo
El endurecimiento de las
arterias se produce con el tiempo. Además del envejecimiento, algunos
factores que aumentan el riesgo de padecer ateroesclerosis son los
siguientes:
Presión arterial alta
Nivel de colesterol alto
Diabetes
Obesidad
Tabaquismo y otros consumos de tabaco
Antecedentes familiares de enfermedades del corazón tempranas
Falta de ejercicio
Dieta no saludable
Alcohol
La edad.
Complicaciones
Las complicaciones de la ateroesclerosis dependen de qué arterias están bloqueadas. Por ejemplo:
Enfermedad de las arterias coronarias.
Cuando la ateroesclerosis hace que se estrechen las arterias cercanas
al corazón, se puede contraer la enfermedad de las arterias coronarias,
la cual puede producir dolor de pecho (angina de pecho), ataque cardíaco
o insuficiencia cardíaca.
Enfermedad de las arterias carótidas.
Cuando la ateroesclerosis hace que se estrechen las arterias cercanas
al cerebro, es posible que contraigas la enfermedad de las arterias
carótidas, las cuales pueden producir accidentes isquémicos transitorios
o accidentes cerebrovasculares.
Enfermedad arterial periférica.
Cuando la ateroesclerosis hace que se estrechen las arterias de los
brazos o las piernas, es posible que contraigas problemas de circulación
en los brazos y las piernas, conocidos como «enfermedad arterial
periférica». Esto podría hacer que te vuelvas más sensible al calor y el
frío, al aumentar el riesgo de quemaduras o congelación. En raras
ocasiones, la mala circulación en los brazos y las piernas puede
producir muerte de tejido (gangrena).
Aneurismas.
La ateroesclerosis también puede producir aneurismas, una complicación
grave que puede ocurrir en cualquier parte del cuerpo. Un aneurisma es
una protuberancia en la pared de la arteria.
La mayoría de las
personas con aneurismas no presenta síntomas. Puede ocurrir dolor y
pulsación en la región de un aneurisma, los cuales se consideran de
urgencia médica.
Si se rompe un aneurisma, es posible que haya
sangrado interno que ponga en riesgo la vida. Aunque esto sea
generalmente un evento catastrófico y repentino, es posible que haya una
filtración lenta. Si se desprende un coágulo sanguíneo dentro de un
aneurisma, este podría bloquear una arteria en algún punto distante.
Enfermedad renal crónica.
La ateroesclerosis puede hacer que se estrechen las arterias que se
dirigen a los riñones, lo cual evita que la sangre oxigenada llegue a
ellos. Con el tiempo, esto puede afectar la función renal y obstaculizar
la eliminación de los desperdicios del cuerpo.
Prevención
Los mismos cambios para un estilo de
vida saludable recomendados para tratar la ateroesclerosis también
ayudan a prevenirla. Estos comprenden: