Alergia al polen: consejos para evitarla

Los molestos síntomas de la alergia al polen pueden prevenirse con una serie de sencillos consejos

29.03.2014 | 17:12
Sintomas de la alergia.
Sintomas de la alergia.

'Apps' contra alergias primaverales

  • Polen control: Informa de los niveles de polen diarios. Permite realizar un seguimiento diario de la patología y enviar un informe al médico. Gratuita y disponible para iOS y Android.
  • Alergo Alarm: Orientada a los médicos de Atención Primaria. Su sistema de geolocalización automática muestra los niveles de polen en el lugar donde nos encontramos. Gratuita y disponible para iOS y Android.
  • AlertaPolen: Ofrece datos en base a una selección en tres apartados: "Mis Alergias" (permite escoger los tipos de polen a los que se es sensible.), "Localidades" (permite seleccionar las localidades de las que se desea recibir información) y "Mis Alarmas" (permite establecer para qué tipos de polen recibiremos una alarma y si ésta será sonora o visual. La selección se puede realizar entre los marcados previamente en Mis Alergias). Gratuita y disponible para iOS y Android.
Esta primavera se presenta complicada para los alérgicos al polen. Los expertos calculan una concentración de 5.600 granos por metro cúbico de aire, una cifra ligeramente más alta que la registrada el año pasado (5.400 granos/m3), por lo que la situación para estos pacientes es considerada de "alto riesgo".
Los efectos del polen ya han comenzado a notarse, pero alcanzarán una mayor intensidad en abril, mayo y junio. Ante este panorama, conviene que estos enfermos tomen medidas para evitar en la medida de lo posible los molestos síntomas de esta alergia. Y es que mantener la enfermedad bajo control, minimiza su impacto.
Hay que diferenciar entre los pacientes que saben que son alérgicos al polen y los que lo desconocen o no están diagnosticados. "Estos últimos deben tener en cuenta síntomas como lagrimeo, picores en la nariz, estornudos e incluso pitidos o fatiga, y acudir al médico", comenta el especialista Mikel Egurrola.
Un diagnóstico correcto es clave a la hora de establecer el tratamiento con inmunoterapia y modificar el curso natural de la enfermedad alérgica. "A los alérgicos no diagnosticados es preciso realizarles una batería de alergias múltiples (pino, abedul, gramíneas...). Esto es porque en las ciudades, el polen que hay en el ambiente nunca sabes exactamente de dónde viene", aclara este experto.
Otro aspecto a valorar por los alérgicos al polen es el de los cambios de humedad y temperatura, que pueden dar lugar a una infección vírica o bacteriana, como puede ser un simple resfriado, lo que puede multiplicar por dos la virulencia de los síntomas alérgicos.
En cualquier caso, los consejos a seguir para ambos pacientes son los mismos. En primer lugar, deben evitar en la medida de lo posible la exposición a campos de polen; si viajan en coche, llevar las ventanillas subidas, así como lavarse de forma frecuente manos y cara.
Mascarillas y fármacos
Aunque no es muy habitual, también es recomendable usar mascarillas, especialmente en ambientes de elevada contaminación. "Sobre todo para quienes son muy sensibles a la inhalación de polen. Pero para ello hay que ser excesivamente alérgico, de lo contrario no es necesario este tipo de medidas", matiza el neumólogo.
Respecto al uso de fármacos, se aconseja a los alérgicos al polen 'armarse' de antihistamínicos, descongestionantes nasales, bien naturales como agua de mar o con corticoides en forma de spray nasal para intentar desinflamar la mucosa, lágrimas artificiales para aliviar el picor de ojos, o inhaladores por si sufren síntomas respiratorios, como fatiga.
También existen vacunas para prevenir los síntomas de la alergia. No obstante, "la evidencia científica sobre el resultado de las vacunas está muy cuestionada. Su efectividad no está demostrada", precisa el doctor Egurrola.
Alergia a la Alternaria
Clásicamente la alergia primaveral se refiere exclusivamente a los pólenes, sin embargo está alcanzando cada vez más relevancia la alergia a la Alternaria. Se trata de un hongo que también se encuentra en las plantas, y que afecta al 15% de la población.
La sensibilización a la Alternaria se asocia de manera muy estrecha al asma bronquial y a la rinoconjuntivitis, y afecta más a los niños que a los adultos. La mayoría de los alérgicos a este hongo también lo son a pólenes, pero la presencia de asma es superior en este grupo de pacientes.
"El asma por Alternaria muestra una peor evolución que el provocado por los pólenes de gramíneas y olivo, con mayor riesgo de descompensación clínica y asistencias a urgencias", explica el doctor Francisco Feo, presidente del Comité de Aerobiología de la Sociedad Española de Alergología e Inmunología Clínica (SEAIC). "Atenciones que aumentan en las jornadas posteriores a días de lluvia, en momentos de tormenta y ante cambios meteorológicos bruscos. Este fenómeno favorece una mayor penetrabilidad en el árbol respiratorio, incrementado las crisis asmáticas".
En este caso concreto, "la vacuna específica resulta muy eficaz", asegura el doctor Feo. Y es que para los niños alérgicos a este hongo, que "tienen síntomas prácticamente todo el año", los inhaladores no dejan de ser parches que no ayudan a modificar el curso de la enfermedad.

¿Sal marina o sal común?

En el mercado encontramos diferentes tipos de sal, sin embargo, dependiendo del origen de las mismas, existen dos grandes, grupos: la sal marina y la sal de roca. La primera usada en su forma natural, tal cual como se origina de la evaporación del agua de mar, tiene grandes propiedades para la salud.
Existen algunas diferencias entre la sal marina y la sal de mesa común que utilizamos cotidianamente, por ello, planteamos las dos alternativas y daremos algunos datos para que puedas escoger con fundamento entre una u otra opción.
La sal de mesa común es, mayormente, cloruro de sodio, aunque contiene algunos otros minerales tales como magnesio, potasio, yodo, entre otros. Sin embargo, la sal marina posee más oligoelementos y minerales, sobre todo, tiene mayor contenido en yodo, lo cual contribuye a la salud del organismo.
Por otro lado, la sal marina tiene un sabor más fuerte y por ende, se suele emplear menor cantidad para sazonar las comidas, algo muy favorable si consideramos que en general, se consume mucho más sodio de lo que necesitamos.
La sal marina tiene un color gris, propio de su estado natural y al ser menos refinada que la sal que empleamos habitualmente para condimentar, posee más nutrientes y más sabor, lo cual contribuye a nuestra salud, favoreciendo la ingesta moderada de sodio que tanto se busca en la actualidad para prevenir enfermedades asociadas a un exceso de sodio en la dieta.
Éste tipo de sal marina se puede encontrar en establecimientos de productos naturales u orgánicos y realmente, es recomendable para reducir la ingesta de sodio a un nivel razonable, sin dejar de aprovechar sus nutrientes beneficiosos.

..............OTROS CONSEJOS............

Lo más sano sería comer sin sal porque las verduras, carnes y pecao ya la trae incorporada.
El abuso de la la provoca hipertensión y lesiones cardiovasculares.
Una buena campaña de salud mundial sería reducir el consumo de sal en restaurates y preparados de comida rápida.
Dentro de las sales, la mejor es la sal mariana, de la mejores son las de Torrevieja y Santa Pola (Alicante).

Nuestros «cerebros» se van La investigación alicantina ve impotente.

Nuestros «cerebros» se van

La investigación alicantina ve impotente cómo se pierde una generación de excelentes especialistas

28.02.2014 | 12:18 /Diario Información
Nuestros «cerebros» se van
Nuestros «cerebros» se van

Las claves

  • Desde el gabinete de empleo de la Universidad de Alicante destacan que la sociedad no es consciente de la grave situación
  • Director de Biodiversidad: «Ganan concursos muy competitivos fuera y aquí seguimos precario»
  • Director de Síntesis Orgánica: «No tienen prácticamente nada en su tierra, por lo que deben emplearse fuera»
  • Secretariado de Investigación: «La tendencia a emigrar ha aumentado progresivamente en los últimos años»

Las cifras

  • 15% de doctores que emigran. El promedio de investigadores doctores de la Universidad de Alicante que ha logrado puestos de relevancia fuera de España en los últimos años, coincidiendo con lo peor de la crisis, alcanza el 15%.
  • 50% de pérdida de proyectos. El recorte de proyectos de investigación concedidos a la UA dentro del programa nacional de I+D ha sido significativo en tan solo un año: han pasado de 155 a 85, lo que implica una pérdida económica desde 8,3 millones de euros a los 3,8 millones recibidos finalmente.
  • 3,2 millones menos. Los recursos captados por contratos y convenios de investigación también han caído para la UA en tres millones: desde los 17,8 millones a los 14,6 millones de euros.
Latinoamérica, Europa, Estados Unidos y Canadá dan empleo estable y de primer nivel a investigadores de la provincia que no disponen de oportunidades en un país que ha invertido años y dinero público en formarles y que ahora les deja ir porque no financia ni proyectos ni convenios. Un 15% de los investigadores alicantinos se van.
­Se nos van a Inglaterra, Suecia, Alemania, Francia, Canadá, Serbia, Holanda, México, Chile... No hay país que no tenga un investigador formado en Alicante entre sus primeros espadas. Valoran nuestros «cerebros», es indudable; el problema reside en que están ahí porque en España no encuentran oportunidades y todo lo que se ha invertido con fondos públicos para forjar su excelente formación no revierte en sacar del hoyo a este país, sino en fortalecer a otros que siguen invirtiendo en investigación mientras aquí se recorta. «Es muy importante que la sociedad sea consciente de que formamos a los mejores y que se nos están marchando», remarca María José Parra, responsable del servicio de prácticas en la Universidad de Alicante (UA).

«Es prioritario formar gente, pero que luego se pueda incorporar entre nosotros, porque si no esto se paraliza», reflexiona a su vez el catedrático de Zoología Eduardo Galante, que preside la Asociación Española de Entomología y dirige el Instituto Universitario de Investigación de la Universidad de Alicante CIBIO, (Centro Iberoamericano de la Biodiversidad).