Comer, mantenerse y belleza. Escaparate internacional de ventas. Nadie puede darnos felicidad, porque la felicidad está en nuestro interior. El deseo es considerado la causa de todo sufrimiento. Actívate. Hace unos años decidí perder peso, pero sin éxito, volvía a recuperar los kilos perdidos. Hasta que decidí aprender nutrición y encontré, por fin, mi piedra filosofal alimenticia: adelgazar comiendo. NADIE DEBE AUTOMEDICARME. Lo que dice este blog es solo orientativo.
Apiterapia
El veneno de abeja y la sanación natural
Este es sin duda de todos los productos del panal, el mas controvertido de todos ellos. Hipocrates ya trataba su reumatismo con el veneno de abeja y Carlomagno aprovechaba sus propiedades terapeuticas para paliar sus violentos ataques de gota.
El veneno de la abeja, Apitoxina, es 500.000 veces más potente que cualquier otro antibiótico conocido; uno de sus componentes, el péptido 401 con actividad antiinflamatoria es 100 veces más activo que la hidrocortisona, tiene número opial 80, Adolapina, lo que quiere decir que es 80 veces más potente como calmante del dolor que el opio o la morfina; además dilata los vasos capilares y acelera e intensifica la circulación sanguínea, es hipotensor, posee acción neurotrópica, es decir mejora el funcionamiento del metabolismo del sistema nervioso central y periférico, actúa como anestésico local, mejora el funcionamiento del hígado y del cerebro, disminuye la Colesterina, acelera la soldadura de fracturas, aumenta la eliminación de toxinas acumuladas, destruye el crecimiento bacteriano, estimula el sistema inmunológico, disminuye el ritmo cardíaco y la presión arterial, entre otras muchas cosas y no tiene efectos secundarios.
Aliviando los síntomas de: artritis, artrosis, discopatías, enfermedades autoinmunes, esclerósis, hombro congelado, lesiones, ciática, osteoartritis, picadura, psoriasis, síndrome de túnel carpiano, tendinitis, entre otros.
NO SE PUEDE APLICAR A MUJERES EMBARAZADAS NI A PERSONAS CON MARCAPASOS.
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En 1914 un medico y apicultor austriaco inicia sus primeras experiencias en este terreno cuando sus dolores reumaticos disminuyen tras ser picado por una abeja. Establecio una relacion de "causa y efecto" y durante mas de treinta años estuvo experimentando con muchos reumaticos la aplicacion del veneno de abeja, creando una nueva ciencia medicinal: la apiterapia, aun muy poco conocida en la actualidad.
Segun numerosas observaciones y a traves de los datos obtenidos en encuestas realizadas acerca del estado de salud de los apicultores, se ha podido constatar que el veneno de abeja, ademas de ser un remedio eficaz contra cierto numero de enfermedades, constituye un medio profilactico excelente. Pero asi como los otros productos del panal (la miel, la jalea real, el polen o el propolis) no tienen ningun tipo de toxicidad y no presentan contraindicaciones ni solos, ni empleados junto a otras terapias, no ocurre lo mismo con el veneno de abeja.
Su empleo inconsciente y a la ligera, pueden producir trastornos graves. Es por ello que la aplicacion del veneno de abejas debe ser practicada siempre bajo la direccion de un medico conocedor de la materia y un apiterapeuta experimentado.
Las abejas utilizan su aguijón para defender su colmena y para defenderse ellas mismas en caso necesario. Este aguijón normalmente esta oculto en el interior de su abdomen; cuando se acerca el peligro, surge de ellas de forma inmediata. Se trata de un canalillo afilado, en cuyo eje se deslizan dos lancitas dentadas, como un verdadero conducto, que comunica con la bolsa de veneno.
La abeja, una vez que ha picado, trata instintivamente de alejarse, pero los dientes del aguijon la mantienen sujeta a la piel y junto al aguijón. Sus ganglios nerviosos de la cadena abdominal tienen ramificaciones que gobiernan, incluso fuera del cuerpo de la abeja, la contracción del deposito, de manera que el veneno sigue penetrando en la piel del que ha sido picado. Cuando consigue separarse, la abeja muere al cabo de algunas horas.
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Alergia al veneno de las abejas
La picadura posee efectos saludables, que no lo seran tanto, desde luego, para todos aquellos que sean alergicos a las picaduras de las abejas. Sin embargo, este tipo de alergia es tratable y al cabo de un tiempo la persona desalergizada ya no reaccionara violentamente y podra hacerse el tratamiento con cautela.
La cantidad de veneno que se introduce en nuestro cuerpo con una picadura es infima, del orden del 1/10.000 de gramo (hacen falta unas 10.000 abejas para obtener un gramo de veneno). Y, sin embargo, esa aparente inofensiva cantidad de veneno, ademas de un fuerte dolor, puede provocar en las personas que sean alergicas al veneno muchas complicaciones que hacen necesaria incluso la presencia de un medico y un tratamiento antihistaminico.
Esta minuscula gotita de veneno introducida en nuestro cuerpo tras la picada de una abeja es una sustancia muy activa. Su peligrosidad aumenta en proporcion a la cantidad hasta convertirse en toxica. Se calcula que aproximadamente un 1% de la poblacion es hiperalergica a las picadas de abeja y avispas.
En individuos con un buen estado general de salud y no sensibilizados, o alergicos al veneno de abeja, se ha demostrado que se pueden soportar bastante bien de 1 a 25 picaduras, causando pequeñas molestias como el enrojecimiento de la zona afectada y su ligera hinchazon asi como una sensacion dolorosa como de quemazon.
Cuando se producen de 200 a 300 picaduras simultaneas se produce una gran intoxicacion de todo nuestro organismo con trastornos caracteristicos como la aceleracion del pulso, convulsiones, paralisis, enrojecimiento de toda la piel, picazon en el cuero cabelludo, sensacion de fatiga y perdida del equilibrio, vomitos, enrojecimiento de los ojos, y afecciones al sistema respiratorio.
Al contrario, en individuos alergicos o sensibilizados una simple picadura bastara para provocar una jaqueca aguda, vomitos, diarrea, urticaria... Afortunadamente, estos casos son los menos. Y en la mayoria de las personas el organismo reacciona debilmente o nada en absoluto.
Se ha observado y demostrado como los apicultores, tan frecuentemente en contacto con las abejas, soportan sin problemas sus picaduras. La mayoria durante sus primeros tres años de trabajo con las abejas acaban inmunizados. Una inmunidad un tanto especial y discutida pues los apicultores durante el invierno, al dejar de estar en contacto con las abejas, dejan de ser inmunes a ellas, pero eficaz en suma, pues vuelve a acompañarles cuando la necesitan.
Cuando nos pica una abeja, lo primero que hay que hacer es extraer el aguijon que ha quedado clavado en nuestra piel, pues cuanto mas tiempo se tarde, mas veneno pasa a la sangre.
Tampoco debemos intentar nunca sacarlo con los dedos pues apretaremos involuntariamente la bolsita de veneno, que se vaciara por completo. Lo mejores ayudarse con unas pinzas. Seguidamente, nos sera de gran utilidad la aplicacion de una pomada de base de extracto alcoholico de calendula y vaselina o una cataplasma de arcilla. El alcohol tambien ayuda a neutralizar el veneno.
Cuando surgen complicaciones es conveniente avisar de inmediato a un medico.
En el tratamiento de la apiterapia, siempre se comprobara antes de su utilizacion si el paciente es alergico o no.
Sumadas las experiencias de la observacion y de la investigacion se puede afirmar que el veneno de abeja tiene una acción selectiva sobre el sistema nervioso. El veneno de abeja actua en nuestro organismo de modo muy similar al veneno de avispa.
Se ha llegado a la conclusion y al convencimiento de que las picaduras de las abejas o las inyecciones del mismo veneno determinan la inmunidad, tanto frente al veneno - apitoxina - como a ciertas enfermedades infecciosas. Tras ello aparece el veneno de abeja como un remedio curativo y profilactico que, usado del modo adecuado, funcionara tanto sobre el organo o enfermedad determinados, como sobre el conjunto de nuestro organismo. Volviendo a la hipotesis del pionero de la apiterapia, el veneno introducido en el organismo haria desencadenar en este una inmediata reaccion de defensa.
COMPONENTE DEL VENENO DE ABEJA:
Entre las enzimas (sustancias que aceleran los procesos bioquímicos) más conocidas se destacan:
* Melitina:
o Estimula la pituitaria para liberar ACTH, (hormona adrenocorticotrofica) que estimula las glándulas suprarrenales para producir cortisona.
o Ella actúa sobre el sistema inmunologico, ayudando a que este vuelva a reconocer las articulaciones como parte del cuerpo y no como objetos extraños que urge atacar, como ocurre cuando hay artritis.
o Es un antibiótico natural 100 veces más potente que la penicilina en su actividad antibacteriana, (contra bacteria gram-negativas y especialmente contra la cepa estafilococos aureus)
* Peptido 401:
o Tiene un efecto antiinflamatorio 100 veces más efectivo que la hidrocortizona (reduce el dolor y la inflamación)
* Apamina:
o Estimula la función hipofisicorticorrenal provocando un aumento inmediato del nivel de cortisona en la sangre. Este aumento en el nivel de cortisona contribuye a los efectos antiinflamatorios del veneno de abejas y también a un significativo incremento en los mediadores cerebrales: dopamina, noradrenalina y serotonina. Esto ultimo seria responsable de la elevación anímica.
o Eficaz supresora del dolor.
* Otros componentes:
o Hialuronidasa, Histamina, Fosfolipasa A2, Adolapina, y otros Peptidos y Aminas , ayudan en el tratamiento de muchas ... muchas enfermedades.
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