La Organización Mundial de la Salud señala que la hipertensión arterial (HTA) es la causante del 45% de fallecimientos por cardiopatía y del 51% por accidente cardiovascular.
Más de mil millones de personas en todo el mundo sufren hipertensión y
cada año se producen más de nueve millones de muertes relacionadas con
esta patología cada año.
En España, 14 millones de personas padecen tensión alta descompensada, lo que representa aproximadamente el 50% de los mayores de 55 años. Según declaraciones del doctor Antonio Álvarez-Viéitez, cardiólogo clínico del Hospital La Milagrosa (Madrid), recogidas por medios especializados, a esos pacientes se suman aproximadamente otros cuatro millones que no saben que padecen esta patología. Nueve millones más no tienen su nivel de tensión arterial controlada.
La Fundación Española del Corazón (FEC), a través de su estudio Di@bet.es, confirmó que el 42,6% de la población adulta tiene hipertensión. Los datos de este estudio, publicados en la Revista Española de Cardiología (REC), ponen de manifiesto que los hombres sufren más hipertensión que las mujeres, 49,9% en varones y 37,1% en mujeres.
La FEC recuerda que la hipertensión es un factor de riesgo determinante en el desarrollo de enfermedades cardiovasculares e incide en la importancia de tener controlados los niveles de tensión arterial.
A nivel general, se establece que una persona tiene hipertensión arterial cuando la elevación de la presión arterial se sitúa por encima de los 130/80 mm de Hg. La hipertensión arterial no produce síntomas, lo que facilita el infradiagnóstico.
La ausencia de síntomas en la tensión arterial descompensada implica la necesidad de monitorizar estos parámetros como actor clave para controlar, detectar y prevenir posibles riesgos para la salud.
Una fórmula sencilla de mantener esos niveles a raya es mediante los tensiómetros. En esta lista de tensiómetros digitales muestran un analisis de los mejores tensiómetros de brazo, lo cómodo que es utilizar este dispositivo y la tranquilidad que ofrecen a los usuarios.
Los tensiómetros de brazo, o también de muñeca, son aparatos fiables en su gran mayoría, si bien el mejor modo de garantizar que se utiliza uno adecuado es comprobar si está homologado por alguna entidad reconocida. En España, la Sociedad Española de Hipertensión (SEH) ofrece una lista con los modelos más comunes que han pasado las pruebas para ser homologados.
Además, los expertos recomiendan que a partir de los 40 años todas las personas deberían someterse a un control cardiovascular anual como medida de prevención. Si las cifras de tensión arterial son altas, el médico especialista indicará cuál es el tratamiento a seguir para controlar esos niveles y evitar males mayores.
A nivel doméstico, los tensiómetros digitales son aparatos fiables, pero para diagnósticos más completos se hace necesaria la monitorización ambulatoria de la presión durante 24 horas, el Holter de tensión. Con este dispositivo se aprecian picos tensionales, los porcentajes de tensión y la tensión durante el sueño.
En la mayoría de ocasiones, la tensión alta descompensada puede pasar a valores adecuados de presión arterial con pequeñas medidas como aumentar los niveles de potasio o llevar una dieta mediterránea. [Eliminar o reducir la sal, y las grasas, el alcohol y no fumar ni drogarse].
Carlos Fernández, médico de familia en el Servicio Andaluz de Salud, insiste a través de diversos medios de difusión en la necesidad de beber diariamente un mínimo de 2,5 litros de agua en el caso de los hombres y 2 litros en el caso de las mujeres.
Así mismo, es importante aumentar los niveles de potasio, ya que este mineral ayuda a reducir la presión arterial mediante el equilibrio sodio-potasio.
Con respecto a los hábitos alimenticios, la dieta mediterránea es la más recomendada para el cuidado de la salud, pues es la que se ha demostrado como más eficaz para reducir el riesgo cardiovascular. Una última recomendación nutricional es evitar el consumo de más de 5 gramos al día de sal, pues existe una relación directa entre el exceso de sodio en la dieta y la tensión arterial alta.
Finalmente, es fundamental acompañar los hábitos alimentarios favorables con otras prácticas como realizar al menos 30 minutos de actividad física al día, controlar el nivel de sobrepeso y dejar de fumar y todas las bebidas alcoholicas incluido vino y cervezas.
En España, 14 millones de personas padecen tensión alta descompensada, lo que representa aproximadamente el 50% de los mayores de 55 años. Según declaraciones del doctor Antonio Álvarez-Viéitez, cardiólogo clínico del Hospital La Milagrosa (Madrid), recogidas por medios especializados, a esos pacientes se suman aproximadamente otros cuatro millones que no saben que padecen esta patología. Nueve millones más no tienen su nivel de tensión arterial controlada.
La Fundación Española del Corazón (FEC), a través de su estudio Di@bet.es, confirmó que el 42,6% de la población adulta tiene hipertensión. Los datos de este estudio, publicados en la Revista Española de Cardiología (REC), ponen de manifiesto que los hombres sufren más hipertensión que las mujeres, 49,9% en varones y 37,1% en mujeres.
La FEC recuerda que la hipertensión es un factor de riesgo determinante en el desarrollo de enfermedades cardiovasculares e incide en la importancia de tener controlados los niveles de tensión arterial.
A nivel general, se establece que una persona tiene hipertensión arterial cuando la elevación de la presión arterial se sitúa por encima de los 130/80 mm de Hg. La hipertensión arterial no produce síntomas, lo que facilita el infradiagnóstico.
¿Qué causas más comunes son las que favorecen la hipertensión?
Las causas que provocan esta enfermedad son desconocidas en el 95% de los casos, pero pueden influir cuestiones hereditarias, la obesidad, el sedentarismo, algunos medicamentos antiinflamatorios, la ingesta de drogas o la apnea del sueño.La ausencia de síntomas en la tensión arterial descompensada implica la necesidad de monitorizar estos parámetros como actor clave para controlar, detectar y prevenir posibles riesgos para la salud.
Una fórmula sencilla de mantener esos niveles a raya es mediante los tensiómetros. En esta lista de tensiómetros digitales muestran un analisis de los mejores tensiómetros de brazo, lo cómodo que es utilizar este dispositivo y la tranquilidad que ofrecen a los usuarios.
Los tensiómetros de brazo, o también de muñeca, son aparatos fiables en su gran mayoría, si bien el mejor modo de garantizar que se utiliza uno adecuado es comprobar si está homologado por alguna entidad reconocida. En España, la Sociedad Española de Hipertensión (SEH) ofrece una lista con los modelos más comunes que han pasado las pruebas para ser homologados.
¿Cómo controlar la tensión alta descompensada?
Esta patología, que se va agravando con el paso de los años hasta el punto de que más del 60% de las personas de más de 65 años la padecen, puede ser controlada con cambios en los hábitos de vida relacionados con la dieta, la actividad física, el tabaquismo o el consumo de alcohol y los episodios de estrés.Además, los expertos recomiendan que a partir de los 40 años todas las personas deberían someterse a un control cardiovascular anual como medida de prevención. Si las cifras de tensión arterial son altas, el médico especialista indicará cuál es el tratamiento a seguir para controlar esos niveles y evitar males mayores.
A nivel doméstico, los tensiómetros digitales son aparatos fiables, pero para diagnósticos más completos se hace necesaria la monitorización ambulatoria de la presión durante 24 horas, el Holter de tensión. Con este dispositivo se aprecian picos tensionales, los porcentajes de tensión y la tensión durante el sueño.
Consejos para mantener una presión sanguínea correcta
Los valores normales de tensión arterial son aquellos en los que la presión arterial se sitúa por debajo de los 120/80 mm Hg. Si el valor del número superior de la presión arterial es superior a 120 mm Hg y el menor es inferior a 80 mm Hg, se padece presión arterial elevada.En la mayoría de ocasiones, la tensión alta descompensada puede pasar a valores adecuados de presión arterial con pequeñas medidas como aumentar los niveles de potasio o llevar una dieta mediterránea. [Eliminar o reducir la sal, y las grasas, el alcohol y no fumar ni drogarse].
Carlos Fernández, médico de familia en el Servicio Andaluz de Salud, insiste a través de diversos medios de difusión en la necesidad de beber diariamente un mínimo de 2,5 litros de agua en el caso de los hombres y 2 litros en el caso de las mujeres.
Así mismo, es importante aumentar los niveles de potasio, ya que este mineral ayuda a reducir la presión arterial mediante el equilibrio sodio-potasio.
Con respecto a los hábitos alimenticios, la dieta mediterránea es la más recomendada para el cuidado de la salud, pues es la que se ha demostrado como más eficaz para reducir el riesgo cardiovascular. Una última recomendación nutricional es evitar el consumo de más de 5 gramos al día de sal, pues existe una relación directa entre el exceso de sodio en la dieta y la tensión arterial alta.
Finalmente, es fundamental acompañar los hábitos alimentarios favorables con otras prácticas como realizar al menos 30 minutos de actividad física al día, controlar el nivel de sobrepeso y dejar de fumar y todas las bebidas alcoholicas incluido vino y cervezas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario