Los casos de esta enfermedad aumentan debido a la mala alimentación, según el doctor Eliseo Pascual
antonio teruel 29.07.2014 | 20:07 /Información
La gota, la artritis provocada por la acumulación de cristales de acido úrico,
es una enfermedad de alta prevalencia entre los hombres, hasta el punto
de que a lo largo de la historia incluso varios reyes españoles la han
padecido.
Su diagnóstico es fácil, y su tratamiento no suele ser complicado; sin embargo, esta dolencia está cada vez más extendida debido a los malos hábitos alimentarios y de estilo de vida, y sus consecuencias sí pueden ser graves.
Lo constata el jefe de Reumatología del Hospital General de Alicante, Eliseo Pascual, al que un estudio realizado por una aseguradora médica norteamericana sitúa como el quinto mayor experto en gota de todo el mundo.
¿Debemos estar preocupados frente al avance de la gota?
Sí, pero sin alarmismos. Lo más importante que hay que saber sobre la gota es que es una enfermedad que se puede tratar y curar. Por ello, la población no debe sufrir por la presencia de la gota.
Entonces, ¿por qué se llama la atención sobre ese avance?
Recientemente se ha visto que quien tiene gota tiene también más riesgo de sufrir enfermedades coronarias. Entre ellas, la arteriosclerosis, que puede ser también la base de la impotencia. Y no hay que olvidar que la gota es la artritis aguda más común, algo que tiene también efectos directos sobre la salud.
¿Por qué aparece más esta enfermedad entre los hombres?
En las mujeres, los estrógenos hacen que el riñón elimine mejor el ácido úrico; entre los hombres, al no tener esas hormonas, esto no ocurre. La afección de la gota por sexos suele ser de una mujer por cada 15 hombres. Suele aparecer con la pubertad, porque los niños eliminan mejor el ácido úrico. En cualquier caso, cuando se normaliza la dieta se mejora también la excreción, a cualquier edad.
¿Y no seguir una dieta normalizada contribuye a que la enfermedad se desarrolle?
Eso es. La mayor parte de las veces la gota se asocia a factores como hipertensión, obesidad y niveles altos de colesterol. En la actualidad, la enfermedad va a más en todo el mundo porque la comida basura se consume de manera más extendida. Una ingesta excesiva de alimentos no recomendados aumenta el riesgo de padecer gota y sus consecuencias; y, entre ellas, el riesgo de tener una vida más corta.
Así, la dieta debe ser la mejor herramienta de prevención...
El primer paso para la prevención de la gota es hacer deporte y comer sano, nada más. Es esencial hacer ejercicio y alimentarse con moderación, y, en todo caso, dejar los festines para las ocasiones especiales. No se trata de prohibir ni de cortar nada, pero sí de guardarse un poco para esas grandes celebraciones que todos tenemos de vez en cuando, y en las que no vigilamos tanto que comemos y bebemos. Una cosa es eso, una ocasión especial, y otra la ingesta diaria de comida basura.
¿Qué beneficios aporta para el enfermo de gota el seguir un tratamiento adecuado?
El primordial, evitar mucho sufrimiento y disminuir el riesgo de consecuencias asociadas como la arteriosclerosis. Tanto el diagnóstico como el tratamiento de gota son muy baratos desde el punto de vista sanitario; no hacen falta grandes pruebas, sino únicamente que tanto el médico como el paciente sepan muy bien qué llevan entre manos.
¿En qué punto se encuentra ahora la investigación sobre la gota y sus consecuencias?
Queremos entender cómo se forman los cristales de ácido úrico, y a qué velocidad deben disolverse.
Yo creo que es mejor ir cuanto más rápido se pueda, para evitar el sufrimiento al paciente en la medida de lo posible, así como otras enfermedades graves asociadas a la gota.
¿Y cree que se avanza en ese terreno en estos momentos?
España es el noveno país del mundo en comunicaciones científicas sobre gota. Esto es un indicio de lo que se hace aquí, y creo que ese potencial no se puede dejar perder, sino que hay que aprovecharlo en beneficio del paciente.
Su diagnóstico es fácil, y su tratamiento no suele ser complicado; sin embargo, esta dolencia está cada vez más extendida debido a los malos hábitos alimentarios y de estilo de vida, y sus consecuencias sí pueden ser graves.
Lo constata el jefe de Reumatología del Hospital General de Alicante, Eliseo Pascual, al que un estudio realizado por una aseguradora médica norteamericana sitúa como el quinto mayor experto en gota de todo el mundo.
¿Debemos estar preocupados frente al avance de la gota?
Sí, pero sin alarmismos. Lo más importante que hay que saber sobre la gota es que es una enfermedad que se puede tratar y curar. Por ello, la población no debe sufrir por la presencia de la gota.
Entonces, ¿por qué se llama la atención sobre ese avance?
Recientemente se ha visto que quien tiene gota tiene también más riesgo de sufrir enfermedades coronarias. Entre ellas, la arteriosclerosis, que puede ser también la base de la impotencia. Y no hay que olvidar que la gota es la artritis aguda más común, algo que tiene también efectos directos sobre la salud.
¿Por qué aparece más esta enfermedad entre los hombres?
En las mujeres, los estrógenos hacen que el riñón elimine mejor el ácido úrico; entre los hombres, al no tener esas hormonas, esto no ocurre. La afección de la gota por sexos suele ser de una mujer por cada 15 hombres. Suele aparecer con la pubertad, porque los niños eliminan mejor el ácido úrico. En cualquier caso, cuando se normaliza la dieta se mejora también la excreción, a cualquier edad.
¿Y no seguir una dieta normalizada contribuye a que la enfermedad se desarrolle?
Eso es. La mayor parte de las veces la gota se asocia a factores como hipertensión, obesidad y niveles altos de colesterol. En la actualidad, la enfermedad va a más en todo el mundo porque la comida basura se consume de manera más extendida. Una ingesta excesiva de alimentos no recomendados aumenta el riesgo de padecer gota y sus consecuencias; y, entre ellas, el riesgo de tener una vida más corta.
Así, la dieta debe ser la mejor herramienta de prevención...
El primer paso para la prevención de la gota es hacer deporte y comer sano, nada más. Es esencial hacer ejercicio y alimentarse con moderación, y, en todo caso, dejar los festines para las ocasiones especiales. No se trata de prohibir ni de cortar nada, pero sí de guardarse un poco para esas grandes celebraciones que todos tenemos de vez en cuando, y en las que no vigilamos tanto que comemos y bebemos. Una cosa es eso, una ocasión especial, y otra la ingesta diaria de comida basura.
¿Qué beneficios aporta para el enfermo de gota el seguir un tratamiento adecuado?
El primordial, evitar mucho sufrimiento y disminuir el riesgo de consecuencias asociadas como la arteriosclerosis. Tanto el diagnóstico como el tratamiento de gota son muy baratos desde el punto de vista sanitario; no hacen falta grandes pruebas, sino únicamente que tanto el médico como el paciente sepan muy bien qué llevan entre manos.
¿En qué punto se encuentra ahora la investigación sobre la gota y sus consecuencias?
Queremos entender cómo se forman los cristales de ácido úrico, y a qué velocidad deben disolverse.
Yo creo que es mejor ir cuanto más rápido se pueda, para evitar el sufrimiento al paciente en la medida de lo posible, así como otras enfermedades graves asociadas a la gota.
¿Y cree que se avanza en ese terreno en estos momentos?
España es el noveno país del mundo en comunicaciones científicas sobre gota. Esto es un indicio de lo que se hace aquí, y creo que ese potencial no se puede dejar perder, sino que hay que aprovecharlo en beneficio del paciente.
